Olga Casado Rodríguez
La gran mentira de la economía, escrito por Gonzalo Bernardos, trata de explicar la crisis económica que comenzó en 2008 y de la que aún hoy en día vivimos las consecuencias y sus efectos. A través de un lenguaje muy comprensible y un relato distendido, el autor desglosa las diferentes causas y culpables de este cataclismo económico. El libro está dirigido a todo aquel que quiera entender este fenómeno económico en profundidad.
Bernardos pone en contexto al lector haciendo un repaso de los antecedentes de la crisis económica. Además, explica varios casos de diferentes partes del mundo donde sucedió lo mismo y cómo lo solucionaron. Un claro ejemplo es el de Japón, donde tuvo lugar una crisis económica de características muy similares a la actual, pero que ocurrió durante la década de los 90.
Explicar un hecho tan complejo como la crisis económica, requiere el uso de terminología muy específica y un lenguaje que puede resultar demasiado técnico en algunos momentos. Sin embargo, el autor logra comunicar de forma comprensible. Se trata de un libro de gran interés para todos los que quieran saber porqué nos encontramos en la coyuntura económica actual.
Bernardos destaca entre los principales culpables del desastre económico a los economistas. Los señala por varias razones, ya que no fueron capaces de prever este cataclismo, y una vez lo tuvieron de frente, fueron incapaces de encontrar una salida viable de la crisis rápidamente. Estos antepusieron sus intereses y su beneficio personal al bien de la ciudadanía, poniendo en un grave peligro a la economía. Por tanto, no llevaron a cabo su trabajo correctamente y fueron sus errores que cometieron los que nos sumieron en esta crisis.
El autor señala la importancia de tomar las decisiones económicas en el momento oportuno, ya que una decisión precipitada es igual de nefasta que una que se toma demasiado tarde. Los encargados de impulsar y supervisar la economía, no sólo han actuado erróneamente, sino que además lo han hecho tarde. Políticos, ministros de economía o directivos de la banca, dominados por una pasión desmedida por el dinero y una utilización inadecuada de la ideología política, han actuado con una falsa prudencia que ha desencadenado en una grave crisis económica y ha provocado unos resultados fatales para el economía.
Uno de los conceptos más mencionados en el libro es el pesimismo económico, provocado por esta mala gestión del poder político y económico. Aunque el autor asegura que esta negatividad es infundada, una simple percepción de la ciudadanía, es innegable que la crisis económica ha sido devastadora, sobre todo en los países del sur de Europa, como España o Portugal. En estos países el empleo se ha visto gravemente afectado y los trabajadores se han visto forzados a subsistir con unos salarios muy bajos. El impacto de las nefastas decisiones en materia económica no sólo ha afectado profundamente a las clases bajas, sino que también ha tenido un gran impacto en la media y en un porcentaje considerable de la alta.
Los modelos económicos no son eternos, la sociedad cambia y de igual manera lo hace la economía. Con el paso de los años, los modelos económicos van quedando obsoletos y desaparecen, dando lugar a nuevas formas de entender la economía y a diferentes respuestas a las demandas de la sociedad y los mercados. Un claro ejemplo de estas transiciones económicas es la del modelo liberal, que se estableció durante los años 30, y que fue desplazado por el modelo keynesiano en los años 70, que más tarde desapareció para dar vida al capitalismo financiero.
El modelo actual ha quedado considerablemente debilitado debido a la crisis económica. Bernardos augura que en los próximos años se producirá otro cambio en la economía, que vendrá motivado por los ciudadanos, que con sus votos, penalizarán una generación política, que con ideología diversa, ha actuado y legislado para favorecer a los mercados. Sin embargo, los cambios en la economía suelen ser progresivos y lentes, ya que pueden llegar a prolongarse durante algunos años. Por tanto, nos encontramos en un periodo de transición económica, en el que se están definiendo las bases del modelo que sustituirá al capitalismo financiero y determinará el funcionamiento económico internacional.
Bình luận